«What the f***?», dirán algunos. Pero no es broma. Está ocurriendo. El negacionismo alcanza incluso a la propia película, con espectadores de todo el mundo afirmando que «No mires arriba» trata precisamente sobre lo contrario de lo que trata. Entre otros, Juan Carlos Girauta, antiguo miembro de Ciudadanos (y del PP, y del PSOE) que ahora participa en actos organizados por VOX. Sí, ese partido que dice que con el calentamiento global «habrá menos muertes por frío».
No te enfades con nosotros, Juan Carlos, pero a lo mejor no has cogido del todo bien el chiste. ¿Eres de los que piensan que el personaje de Meryl Streep representa el comunismo, por llevar una gorra de color rojo? Va a ser que no…
2 / Meryl Streep es Donald Trump, y encima sale desnuda. ¿O no?
Es cierto que, en toda la película, en ningún momento se dice a qué partido pertenece la presidenta de los Estados Unidos encarnada por Meryl Streep. ¿Es republicana, o es demócrata? El propio director y coguionista de «No mires arriba», Adam McKay, ha dicho que «Ninguno de los dos partidos tiene mucho de lo que enorgullecerse en los últimos 40 años». Pero hay detalles que «cantan» bastante.
¿La gorra con visera roja de Meryl es un símbolo del comunismo? Tanto como pueda serlo la gorra roja que llevó Donald Trump en muchos de sus mítines. ¿El hijo de Meryl, interpretado por Jonah Hill, como Jefe del Estado Mayor? Sospechosamente parecido a Jared Kushner, yerno de Donald Trump y uno de los «consejeros» más visible e influyentes de la administración Trump. ¿Tapar escándalos sexuales con rimbombantes iniciativas? Bueno… ¡es verdad que eso lo han hecho los dos partidos!
Pero hay un pequeño detalle incontestable: la propia Meryl Streep insistió a los peluqueros y maquilladores de «No mires arriba» en que quería «el típico peinado rubio de las mujeres republicanas». No es que vayan todas a la misma peluquería, pero Meryl afirma que existe un «estilo republicano», no particularmente favorecedor, pero que utilizan muchas mujeres vinculadas a ese partido, por mostrar un delicado equilibrio entre tradición, conservadurismo, fortaleza y belleza «demodé». E insistió en que le hicieran ese peinado, y no otro, pese a que podía salir más guapa con cualquier otro corte.
Y en cuanto a su desnudo final… no: no es ella. Meryl Streep utilizó una doble cuerpo: ni muestra sus glúteos desnudos en la pantalla, ni tiene tatuajes en la base de la espalda. De hecho, en un principio Leonardo DiCaprio no quería que la presidenta de la película apareciese desnuda, por respeto a Meryl. Pero Adam McKay le convenció de que era lo mejor para la película.
Igual que «afear» al pobre Leo…
3 / Leonardo DiCaprio: contratar al actor más atractivo del mundo… para «afearlo» en la pantalla
En cuanto al aspecto de Leonardo DiCaprio, el equipo del film recibió una instrucción clara y diáfana: debía tener el aspecto menos «sexy» que fuera posible. Adiós, Leo; hola, doctor en Astronomía de la Universidad de Minnesotta al que nadie conoce. En su papel de mediocre y auténtico «looser», el actor tuvo que vestir ropa poco favorecedora, igual que las gafas, la barba y todo su estilismo (su lenguaje corporal, mérito exclusivo del propio DiCaprio, también ayuda mucho).
Si su aspecto es muy realista, también lo son sus diálogos. Por supuesto fueron escritos por alguien que sabe del tema: la astrónoma Amy Manzier, que además ejerció de consultora científica para la película. Pero DiCaprio no quiso conformarse con que sus frases fueran científicamente coherentes: quería entender lo que estaba diciendo. Así que recibió un curso acelerado de dinámicas orbitales, a lo largo de 6 meses, impartido por la propia Manzier.
¿Habría puesto DiCaprio el mismo entusiasmo en aprender astronomía, si su profesor hubiera sido Neil deGrasse Tyson? ¡Seguro que sí! Y seguro que salió con Bar Refaeli para aprender todos los detalles de la cultura israelí. Pero vamos con la otra protagonista de «No mires arriba»…
4 / El mejor efecto especial de «No mires arriba»: los dientes de Jennifer Lawrence
A mitad de rodaje, la coprotagonista de «No mires arriba», Jennifer Lawrence, sufrió un pequeño accidente dental: se rompió un incisivo. Algo que no habría pasado de ser un problema menor…
…salvo porque, en medio de la pandemia de COVID, no hubo manera de encontrar un dentista que pudiera arreglar el diente de la actriz. Tampoco podían dejarlo simplemente roto, porque Jennifer ya había filmado muchas escenas (del comienzo, del medio, del final) y su diente roto rompía la continuidad del film. ¿Qué podían hacer en un caso así?
La respuesta: filmar la película tal cual, y «arreglar» su dentadura en postproducción. Es decir: usar efectos digitales para que sus dientes parecieran intactos. En un film con meteoritos, naves espaciales, explosiones y despliegues militares varios, el mejor efecto especial acabó siendo la sonrisa de Jennifer Lawrence.
5 / Timothée Chalamet aparece con melena porque no pudo ir a la peluquería durante el confinamiento
El «Love Interest» de Jennifer Lawrence en «No mires arriba» acaba siendo el joven actor Timothée Chalamet, también conocido como Paul Atreides en la nueva versión de «Dune». Lo curioso es que Timothée, en un principio, iba a aparecer en la película con el pelo perfectamente corto y arreglado. Pero el rodaje, planificado para abril de 2020, tuvo que aplazarse hasta noviembre de ese mismo año debido al COVID. Y con el actor encerrado en su casa por el confinamiento, su pelo creció, y creció…
…hasta que tuvo una reunión por videoconferencia con el director de la película, Adam McKay. ¿Y qué dijo McKay al verle con melena? Que le encantaba, que le parecía perfecta para el personaje, que por favor no se cortara el pelo. Así se toman a veces las decisiones en las grandes producciones de Hollywood: por p*** casualidad.
6 / Dos amigos de Kate Winslet haciendo de matrimonio
Otro destacado papel en «No mires arriba» es el de Melanie Lynskey: la actriz neozelandesa, famosa por la telecomedia «Dos hombres y medio», que interpreta en la película a la esposa de Leonardo DiCaprio. Y DiCaprio es muy amigo de Kate Winslet desde que rodaron juntos «Titanic». Por eso el actor se llevó una genuina sorpresa al descubrir que Lynskey también conoce a Winslet muy bien. ¡Quizá incluso mejor que él!
Y es que Melanie Lynskey coincidió con Kate Winslet, cuando ambas eran dos principiantes, en la película neozelandesa «Criaturas celestiales» (dirigida por Peter Jackson cuando Jackson no era conocido como«el director de «El señor de los Anillos»», sino como «el director de «Braindead»»). Melanie tenía entonces 15 años de edad, Kate tenía 17, y fue la primera vez que ambas tuvieron papeles principales. Polémicos, además, porque la película recreaba el caso real de dos adolescentes enamoradas que asesinaban a la madre de una de ellas.
De modo que Melanie Lynskey ya había sido, en la ficción, el gran amor de Kate Winslet, ¡tres años antes de que Leonardo DiCaprio lo fuera en «Titanic»! Imaginen la sorpresa, cuando lo supo, del protagonista de «No mires arriba».
7 / A qué millonario tecnológico me recuerda ese personaje…
El gurú de la tecnología encarnado por Mark Rylance en «No mires arriba» es una obvia parodia de los empresarios tecnológicos estilo Steve Jobs, y del discurso mesiánico con que envuelven sus presentaciones mientras prometen regalarnos el futuro (a la vez que se quedan con nuestro dinero, y nuestros datos). Aunque los paralelismos son todavía mayores con Elon Musk: fundador de Tesla y embarcado actualmente en su plan de misiones espaciales privadas.
Mark Rylance VS. Elon Musk.
De hecho, en un momento de «No mires arriba» dicen que el personaje de Rylance, llamado Peter Isherwell, es «la tercera persona más rica de la historia». El pasado mes de octubre de 2021, fue Elon Musk quién logró ser no la tercera, sino la PRIMERA persona más rica de la historia de la humanidad, con un patrimonio personal de 255.000.000.000 dólares. No, no nos hemos equivocado con los ceros. Son todos esos.
Y más aún: en 2018, como ejercicio de exhibición de su poderío espacial, Elon Musk puso en órbita uno de los coches que fabrica su compañía. Un Tesla Roadster de color rojo, para ser exactos. Y un coche muy, pero que muy parecido, puede verse en pantalla, flotando en el espacio, durante los créditos finales de «No mires arriba». Va a ser que no es casualidad…
Un coche rojo flotando en el espacio de «No mires arriba». Mmmmm…
8 / Ni el Capitán América puede salvarnos
En un brevísimo papel, tan breve que si pestañeas te lo pierdes, aparece en la película el actor Chris Evans: famoso por encarnar al mismísimo Capitán América en el Universo Marvel. En la ficción de «No mires arriba», Evans interpreta precisamente a un actor especialista en cine de acción y aventura, llamado Devin Peters. Y aparece promocionando su nuevo film, titulado «Devastación total», que trata sobre… un cometa que impacta contra la Tierra.
Chris Evans / Devin Peters, protagonista de «Devastación total.
Curiosamente, Chris Evans iba a encarnar en un principio al personaje de Peter Isherwell, el gurú tecnológico. Problemas de agenda le impidieron aceptar un papel con tanta presencia en el film, y tuvo que conformarse finalmente con el brevísimo personaje de Devin Peters. A cuya película, «Desastre total», prestan los medios mucho más atención que al verdadera cometa que va directo contra la Tierra…
9 / Si no podemos hacer nada, vámonos todos a foll**
En la parte final de la película, cuando el cometa impacta contra la Tierra aniquilando a la humanidad (a todo ésto, puede que este artículo contenga algún spoiler…) vemos en pantalla, muy brevemente, a una pareja en la cama. No es una toma filmada expresamente para «No mires arriba», sino que pertenece a un vídeo subido en 2019 al canal PornHub.
Un vídeo que, por cierto, acumulaba en el momento del estreno de «No mires arriba» nada menos que 700.000 visitas. ¡Y sin estrellas como Leonardo DiCaprio o Jennifer Lawrence! Pero es que, sinceramente: si llegara el fin de mundo y sólo nos quedaran unas horas por delante, ¿vosotros qué haríais?
«Vaya vaya, de modo que así son los vídeos de PornHub…».
10 / ¿Qué es un «bronteroc»? La respuesta, al final de los créditos
«Tenemos un algoritmo que predice cómo va a morir cada uno, con una precisión del 96’5%», dice Mark Rylance en un momento del film. «¿Y cómo moriré yo?», pregunta Meryl Streep. «Devorada por un bronteroc», responde Rylance. «¿Qué es un bronteroc?». «No lo sabemos».
La respuesta está en una breve y desternillante escena, tras un primer tramo de los créditos finales. ¡No apagues la tele tan pronto, ni te levantes enseguida del cine! El chiste merece la pena, y aquí no lo vamos a «espoilear».
Pero cuando lo veas, ¡sigue sentado! Porque hay otro chiste final, esta vez juuuusto cuando terminan los créditos, en el que vemos al único ser humano que ha sobrevivido, en todo el planeta, a la colisión del cometa. ¿Podrá nuestra especia reiniciarse a partir de él? ¡¡Ojalá que no!! Si quieres averiguar de quién se trata, echa un ojo al siguiente vídeo…
¿Te has quedado con ganas de más? Pues échale un vistazo al nuevo tráiler de «The Batman», con el murciélago y la gata sacando las garras.
Volando de cine en cine desde 1975, aterrizo en "Sesión Doble" con un doble objetivo: hablar de cine, y hablar de televisión. Disfruta con nosotros, opina lo que quieras y critica lo que te parezca: todo es bienvenido. Pero por favor: no me llames Shirley.